Ir al contenido principal

Aprovechando el descanso


(Fotografía tomada por Raul Popadineti)

Hace varios años pasé por una relación que me enseñó todo lo que una pareja no debía ser. En fin, decidí escribir esto para alguien que, a mi parecer, estaba pasando por una situación conocida para mí. Aquí dejo lo escrito.

"Haber estado en ciertas situaciones me han llevado a un aprendizaje. Doloroso, tal vez necesario. Sé que no soy quién para decir lo que una persona pueda o tenga que hacer. Y muchas veces ni siquiera me importa lo que hagan o digan los demás y las consecuencias que aquello trae. Pero, pero, cuando se trata de gente que estimo y quiero, cambia la perspectiva. Y en este caso sabiendo lo que es estar confundida y aún así pendiente de un individuo que no se merece nada de ti, me pone peor. Yo seguía detrás de él: aún con las migajas que me daba, aquellas veces que decía o hacía algo que me causaba un llanto interminable, y muchos más episodios. Toda esa mierda me hacía preguntarme si yo estaba mal, si lo que hacía no era suficiente. Me cuestionaba el valor que tenía como persona, como mujer. Y yo decía amarlo, y él a mí. Nos hicimos daño, del que deja secuelas. ¿Sabes porque yo seguía ahí? Porque dependía de él, porque sin él pensaba que me sentiría sola, incompleta, nada. Sin él era nada, eso resonaba en mi mente cada que tenía la idea de alejarme de su lado. Porque no me quería lo suficiente para terminar con todo e irme, porque su nivel de chantaje emocional fue tal que pensé que no sería recibida en ningún lado, que nadie querría ayudarme o escucharme. Lo único 'bueno' que hizo fue acabar esa relación. Aunque dolió, dolió de maneras que no sabría describir, me volví irreconocible. Me costó mucho tener la fuerza mental para querer y lograr alejarme de él, de su recuerdo, de su fantasma. Las secuelas que dejó en mí, siguen aquí y estoy aprendiendo. Fallé, sí, pero sigo aquí. Estoy aprendiendo que la felicidad y tranquilidad que quiero dependen de mí, y que si una persona viene a querer cambiar todo eso, en vez de contribuir, pues esa persona no tiene porqué seguir en mi vida. Toma tiempo, toma decisiones, toma fracasos, entender que a quien más debemos querer es a uno mismo. Estoy dispuesta a curarme, a aceptarme, a cambiar si es necesario, y a quererme. ¿Por qué no logramos vernos, como nos ven las personas que nos aman? Lo haremos un día, ya verás." 

Modifiqué algunas cosas, ya que la manera en la que pensaba ha cambiado. Leyendo y escuchando a otras personas he conocido acerca de la responsabilidad afectiva, el amor propio (que no es color de rosas necesariamente), la toxicidad en las relaciones sociales, etc. Temas tal vez muy extensos, pero importantes para lograr vivir de manera más serena. Sé que el texto de hoy es más sobrio (hasta tal vez flojo) que de costumbre, solo que la vida a veces me deja sin momentos libres para dedicarme a escribir. Pero así como no me da el tiempo para hacerlo, de alguna manera siempre me hace volver a esto. Y le agradezco por ello.  

Comentarios